¿Qué es la Medicina del Viajero?
La principal motivación de la medicina del viajero es la prevención. Las enfermedades adquiridas durante los viajes son fuente considerable de pérdidas económicas y problemas médicos diversos en ocasiones graves.
Existen diversas vacunas y métodos para prevenir enfermedades comunes y poco comunes durante los viajes que deben evaluarse de acuerdo al itinerario. Por ello, es recomendable recibir una valoración médica con antelación (entre 4 y 6 semanas es un marco de tiempo ideal para ello). En caso de que requieras de alguna vacuna, al momento de aplicarla se te entregará un certificado de vacunación internacional que deberás portar contigo a lo largo de tu viaje y a tu regreso a tu país natal.
Además, la medicina del viajero también se encarga de realizar valoraciones y emitir certificados médicos para personas que realizarán actividades especiales durante el viaje, tales como buceo y alpinismo, entre otras. Asimismo, en las clínicas orientadas a esta especialización se brinda atención a personas que regresan a su país de un viaje con enfermedades poco frecuentes.
¿En qué consiste la Medicina del Viajero?
- Durante la consulta, se solicitan serologías para evaluar inmunidad previa (en caso de ser necesario).
- Se actualizan vacunas del calendario y se detallan las especiales y/o requeridas.
- Se indican medidas de prevención para enfermedades transmitidas por mosquitos como la malaria, dengue, fiebre amarilla y chikungunya, entre otras.
- Se informa a cerca de cómo prevenir la diarrea del viajero y medicación para su tratamiento.
- Se brinda asesoramiento sobre medidas preventivas para accidentes, quemaduras de sol, jet lag y mordeduras de animales.
- También acerca de cómo manejarse con viajeros especiales, ya sean niños pequeños, embarazadas y huéspedes inmunocomprometidos.
Consulta antes de viajar
Los especialistas indican que esta visita al médico especializado deberá realizarse, por lo menos, un mes antes de partir.
Durante la misma, el profesional ofrecerá una serie de recomendaciones de acuerdo al tipo de viaje y de viajero, diseñando así un plan de medidas preventivas y de ser necesario se indicarán las vacunas necesarias.
Cuando se habla del tipo de viaje, se hace referencia a los destinos e itinerario a seguir, a la duración total del mismo, el tipo de viaje (aventura, rural, urbano), tipo de alojamiento, qué actividades se realizarán y el contacto con la población del lugar.
Por su parte, en cuanto a los datos del viajero, habrá que tener en cuenta: edad, estado de salud, inmunizaciones anteriormente recibidas y, claro, su historia clínica.
En tanto, siempre es recomendable realizar un chequeo odontológico, especialmente si las vacaciones se extienden por más de tres meses.
Después del viaje
Habrá que prestar especial atención al regresar a casa. Muchas veces los viajeros suelen pasar por alto ciertos síntomas atribuyéndolos sólo al cansancio.
Pues los especialistas indican que en caso de no sentirse bien, tener fiebre, descubrir lesiones cutáneas, sufrir diarrea o síntomas respiratorios, habrá que concurrir de inmediato a un centro médico.
Pues allí no habrá que obviar información en cuanto al viaje de manera que los médicos tengan en cuenta las posibles enfermedades que viajero pudo haberse contagiado en el lugar.